«Él sabe que la OEA guarda silencio ante las torturas y asesinatos, y no es en Cuba donde hay desaparecidos ni donde surgen esos hechos, y es esa institución la que generó y apoyó el golpe de Estado en Bolivia. Y eso es lo que ha tratado de defender aquí el presidente de Uruguay»
En el contexto de la VI Cumbre de la Comunidad de América Latina y el Caribe, CELAC, el derechista mandatario de Uruguay, Luis Lacalle Pou, dijo estar preocupado por la situación política de Cuba, a lo que el primer mandatario de la isla, Miguel Díaz-Canel, replicó que sus palabras expresaban un gran desconocimiento de la realidad cubana.
Díaz-Canel, además, le señaló a Lacalle que, «El coraje del pueblo cubano se demostró por seis décadas. Escuche usted a su pueblo que juntó más de 700 mil firmas contra la LUC (Ley de Urgente Consideración). El monroísmo y la OEA es lo que acaba de defender usted», y añadió que, «Escuche usted a su pueblo que recogió más de 700 mil firmas contra su paquetazo neoliberal».
El líder cubano señaló que, «El bloqueo es el principal obstáculo de los problemas actuales en la isla, y en su intervención (de Lacalle) no lo menciona», y le recordó al presidente uruguayo que no mencionó la inestabilidad y especulación financiera, la deuda externa impagable y la pobreza y desigualdad que ese sistema genera, y el abismo existente entre el norte rico y el sur pobre.
Desde su surgimiento, como reacción del imperialismo estadounidense a la Revolución Cubana, la OEA es un instrumento de los intereses de las clases dominantes de Estados Unidos, y se ha dedicado a justificar las intervenciones militares, las dictaduras, incluso en Uruguay, los crímenes y desapariciones, y los intentos de contener la resistencia de los pueblos latinoamericanos y caribeños.
«Él sabe que la OEA guarda silencio ante las torturas y asesinatos, y no es en Cuba donde hay desaparecidos ni donde surgen esos hechos, y es esa institución la que generó y apoyó el golpe de Estado en Bolivia. Y eso es lo que ha tratado de defender aquí el presidente de Uruguay», manifestó Díaz-Canel.
Lacalle respondió tarareando una canción contra la Revolución Cubana, a lo que el presidente de la mayor de Las Antillas le contestó señalando que tenía muy mal gusto musical y le propuso que busque lugar y espacio para discutir todos los temas que desee públicamente.
FUENTE | KaosEnLaRed
